Profundidad de campo
Enfoque, profundidad de campo y círculos de confusión
Un objetivo, en teoría, enfoca a un solo plano pues muchos objetivos tienen fallos de planitud y enfocan superficies que se aproximan al plano pero que pueden curvarse o deformarse por los bordes o ciertas zonas (curvatura de campo).
A esa superficie más o menos plana, para entendernos, la llamaremos plano de enfoque y es el plano que se reproduce enfocado en la película o sensor de la cámara.
En un plano enfocado cada punto de la imagen original se reproduce como un punto definido en el plano focal, que es donde están la película o el sensor y la pantalla de enfoque (si la hay).
Los puntos de la escena situados en planos por delante y por detrás de ese plano enfocado ya no se reproducen como puntos nítidos sino como círculos difusos cada vez mayores según se alejan del plano enfocado.
Esos círculos difusos, que corresponden a puntos no enfocados de la imagen se llaman círculos de confusión.
El ojo humano tiene una resolución limitada y si los círculos de confusión (CdC) son lo suficientemente pequeños o se observan a determinada distancia los percibirá como puntos nítidos, o sea, como planos enfocados de la imagen.
La distancia que hay entre el plano más lejano y el más próximo de la escena que el ojo percibe como enfocados es lo que se llama profundidad de campo (PdC) de la imagen final.